
Por: Jorge Poblete
“Cada uno de los temas abordados no pueden ser materia de este informe sin que se vulnere la normativa” sobre la vida privada, dijo el gobernador en el oficio del 13 de enero a Contraloría, donde respondió a la observación del preinforme sobre el potencial desvío de $31 millones en fondos fiscales a su campaña para la reelección.
Por qué importa. El oficio del 13 de enero donde el gobernador Claudio Orrego (ex DC) respondió a la observación del preinforme de Contraloría de haber incurrido en eventuales faltas a la probidad y potenciales desvíos de fondos públicos por un contrato por $31 millones con la consultora Vera y Asociados S.A., mostró cómo la autoridad intentó excluir del informe final de ese organismo los contenidos referidos a su campaña.
El oficio número 160 también adelantó —casi cinco meses antes— los principales argumentos que expuso este jueves, cuando dijo que no hubo desvíos de dinero para su reelección.
“Esto no es un contrato personal, es un contrato institucional. No es político, es organizacional”, dijo Orrego, que anunció que presentará un recurso de reconsideración a Contraloría. “Aquí no ha habido ni un solo peso del Gobierno de Santiago que haya ido a parar a mi campaña”.
Se trataba de su estrategia de control de daños luego que la Contraloría abriera un proceso disciplinario por el caso y la Fiscalía Nacional instruyera a la Fiscalía Metropolitana Oriente abrir una investigación de oficio.
Paralelamente, el Partido Republicano anunció que buscaría la destitución de la autoridad e inició gestiones con Chile Vamos, considerando que la oposición es mayoría en el Consejo Regional.
Doble flanco. La crisis para el gobernador estalló este miércoles, cuando el organismo fiscalizador encabezado por Dorothy Pérez anunció la apertura de un proceso disciplinario en contra del Gobierno Regional (Gore) Metropolitano, tras analizar el “Servicio de asesoría especializada sobre líneas de apoyo para la gestión institucional GS 2024”, por el que el Gore traspasó $31.366.179 a la consultora Vera y Asociados S.A., entre abril y septiembre de 2024.
Los resultados del informe final consignaron que, en 16 sesiones de coaching, de 28 donde hubo registro, se “aludía explícitamente a temáticas, riesgos y acciones relacionadas con la contingencia política y campaña electoral a Gobernador Regional, no en términos generales, sino específicamente a la campaña en la que don Claudio Orrego Larraín se estaba presentando como candidato a la reelección”. De otras 24 sesiones el Gore no entregó las minutas.
Orrego se impuso en la segunda vuelta de noviembre a su rival Francisco Orrego (RN), con un amplio apoyo del oficialismo.
El proceso administrativo abierto por Contraloría corre paralelamente a la investigación del caso ProCultura, donde Orrego declaró como imputado, se levantó su secreto bancario y la Unidad de Análisis Financiero (UAF) del Ministerio de Hacienda detectó grandes retiros en efectivo, lo que Orrego ha negado.
Los descargos de enero. “Del examen efectuado a la asesoría en comento, se constató la entrega de servicios que no se encuentran contemplados en los objetivos y actividades de la citada contratación, como tampoco se relacionan con la naturaleza y finalidades del Gobierno Regional”, dijo la observación de Contraloría.
Exclusión de las minutas. La respuesta de Orrego comenzó con un intentó de excluir las minutas de los coaching, por considerar que correspondían a información personal de los funcionarios.
“Como se advirtió durante la realización de la auditoria, junto con remitir las minutas personales emitidas por el profesional contratado, se hizo presente que la información contenida en los informes se trataba de información sensible”, ya que incluían “test de personalidad, datos sobre la vida privada, entre otros aspectos protegidos”.
“Conforme a lo anterior, se debe tener en consideración que cada uno de los temas abordados, no pueden ser materia de este informe sin que se vulneren la normativa”.
Equipos de campaña. Uno de los hallazgos de Contraloría fue que ya el 6 de febrero de 2024 se había creado un “equipo de campaña” con funcionarios del Gore, ocho meses antes de la primera vuelta del 26 y 27 de octubre.
El Servicio Electoral dispuso que la propaganda electoral comenzara el 28 de agosto y que los gobernadores fueran subrogados el 27 de septiembre.
Al respecto, Orrego respondió que “en cuando a las citas que se reflejan en la tabla respecto a la Asesora de Gabinete, corresponde indicar que las preguntas sobre el ‘equipo de campaña’ surgen a partir de la necesidad de establecer una separación de funciones de ese equipo que se dedicara a la reelección del Gobernador del equipo de gestión del Gobierno Regional”.
“Hay que entender que cuando uno habla del concepto ‘campaña’, debe entenderlo de forma amplia y no reducido a lo temporal, esto es en el entendido que, para asesorar al Gobernador en su gestión, debía abordarse el cómo él debía enfrentar el ataque político”.
Descontextualización. “Las citas que son indicadas en la Tabla N°29 del Pre Informe se encuentran descontextualizadas, extrayendo solo una parte de las conversaciones que tuvo el coach con el directivo o asesor, de lo cual no se puede extrapolar que el servicio de asesoría prestado haya sido contratado con una finalidad política o que sólo abordara temas políticos o de la contingencia”.
