Por: Ricardo Ortiz Perez Ingeniero en Administración

A lo largo de Chile tenemos grandes diferencias climáticas, por un lado está el norte en donde el sol es radiante y hace que la vegetación sea escasa y grandes espacios son desiertos muy áridos. El centro, con un clima más benigno permite el asentamiento de grandes urbes como la capital del reino, el puerto de Valparaíso y un sinnúmero de pequeñas ciudades quienes dependen o están muy ligadas a la capital en donde sus habitantes laboran. El sur es otro tema, con valles, quebradas, ríos y una exuberante vegetación y la siempre presente cordillera semi nevada, todo ello en la normalidad para aquellos que deben estar alertas , no estuvieron a la altura del fenómeno que nos azoto, aunque hacia 20 años que no llovía de esa manera que produjo anegamientos, cauces de ríos desbordados, puente colapsados, carretera inundadas , construcciones instaladas o construidas cercana a ríos y esteros, casas edificadas a nivel de la calle que posibilito ante los desbordes de los ríos el ingreso del agua a las casas con los destrozos e infecciones producto de las aguas servidas que también colapsaron. El emblemático ejemplo nos mostró unos edificio de varios pisos construidos en Concón en asentamientos que al decir de los expertos( hoy) nunca se debió construir y por lo tanto ya el municipio entrego la orden de desalojar por el peligro del colapsamiento de la edificación. En esta tragedia hay que destacar el trabajo y entrega de Carabineros que una vez más acudía a salvar vidas y animales ante tamaño desborde. No es menos cierto que bomberos que con poco material exponían sus vidas para salvar a porfiados vecinos que no querían abandonar sus maltrechas casas que era producto de toda una vida trabajo. Los Municipios haciendo tripa de corazones trabajaron con sus alcaldes a la cabeza. Pero, a lo menos se debe preveer estableciendo controles en las construcciones cercanas a los ríos para que no suceda lo que aconteció. Los Municipios con sus Direcciones de Obras, no pudieron fiscalizar con mayor acuciosidad los permisos que posibilitaron el construir en lugares con peligro de derrumbes o sencillamente a los porfiados que construyeron sus casas en cerros que se sabía que podían colapsar. El gobierno como es dable acudió con todos sus medios y sus autoridades y prontamente se deslizo la idea de un BONO para los damnificados para que de una u otra manera mitigar lo destruido, también dentro de esos planes está en la vivienda de emergencia que deberán ser construidas a la brevedad ya que esta pobre gente está pernoctando en alberges totalmente saturados. Pero, también debemos recordar los grandes incendios en Valparaíso y sus cerros en donde aún están pendientes las ayudas prometidas. Y esta forma de resolver estos temas no solo es una forma de trabajar de este gobierno, otros anteriores aún están debiendo soluciones por terremotos ocurridos hace algunos años. Para nuestra Región alejadas de estas inclemencias y gozando de un excelente clima también nos acecha el posible terremoto y tsunami , para lo cual se hacen pocas las medidas de prevención en donde no bastan el salir paseando hacia los cerros sino prever, alberges, baños para cientos de damnificados, postes con luces con energía de paneles solares , grandes depósitos de agua y evitar el colapsamiento del sistema de alcantarillado que tiene sus instalaciones de aguas servidas a metros de las playas.
